Para Ti.

¿Sabes que? TE AMO! Feliz año, espero que el camino que empiezas este lleno de retos y experiencias hermosas, que aprendas todo lo que te falta por aprender y puedas sonreir,

El lago.

Cuentan aquellos que saben contar cuentos que en un lugar sin tiempo, en momentos sin personajes, había una historia sin nudo, sin inicio aparente pero con un desenlace común.
Dicen que un hombre anciano, sentado a la luz tenúe del ocaso se regocijaba ante un lago cristalino, su cara tenía una inexpresiva paz, si sonrisa inexistente demostraba madurez, sus hombros estaban caídos al igual que su piel, sus ojos, alguna vez de azul intenso, solo reflejaban un impercatable brillo y su pelo no hacía presencia.
Dicen que un minuto antes del anochecer un bebe salió del lago, al verlo el anciano sonrió, en sus brazos debiles lo arrulló y con sus labios fragiles lo besó, una vez hecho esto se acercó a su oreja derecha y susuró:
-No olvides, en el afán de lo que vendrá, la belleza de este lago, que hoy nos arropa en la oscuridad.-
Dichó esto todo oscureció, a la mañana siguiente no había ni bebe ni anciano, solo una pequeña brisa y un sol tranquilizante, el ambiente, inmutable, sonreía, pues la maravilla de la creación seguía su curso, hasta el fin del día...